En Oostvorne nos detenemos en Peter en Tude van de Polder. Rápidamente encontramos un sitio acogedor junto al prado.

(Limpio, acogedor, sin complicaciones y, por tanto, muy recomendable.) Lección del día: fíate de tu corazón y no de la guía.

Comparte nuestro viaje con tus amigos
es_ESSpanish